Vale,
si, ha empezado a hacer frío. También hemos sacado los jerseis
de lana de la abuela que abrigan que te cagas. Si, de acuerdo. Pero
cojo**s, estamos en noviembre (vale, a finales) y este suceso
paranormal ya hace casi un mes que está, valga la redundancia,
sucediendo.
Hablo
del prematuro ambiente navideño.
Quizá
es verdad que los centros comerciales lo utilizan para fomentar el
consumismo y adelantarlo de fecha... ¿pero las ciudades?
Hace
cosa de dos semanas me encontré la calle de mi casa cortada porqué
estaban unos operarios poniendo las luces de Navidad.
Yo
soy la primera a quien le encantan estas fechas, porqué mi mini yo
sale a la luz: me encanta decorar la casa, las comilonas familiares,
participo en la cabalgata de reyes de mi ciudad (Viva el rey
Baltasar!),
en la función de Els Pastorets (tradición catalana) de mi ciudad...
Pero no es necesario empezar a celebrar la Navidad cada año más
temprano... ¡que a este paso los reyes magos llevarán un flotador
al niño Jesús y un bikini sexy a la Virgen María!
En
el centro comercial igual, hace tres semanas fui y ya estaban
montando el árbol...
Hoy
es siete de Noviembre, Fum! Fum! Fum! (léase con la entonación de
la canción).
Pero
si a finales de octubre, mi novio, a quien la Navidad... ni fú ni
fa, me dijo: oye, ya tendremos que empezar a poner el árbol ¿no?
En
fin, que encuentro muy heavy que se haya adelantado tanto la
navidad... pero, en estas fechas tan señaladas, què mejor que un
villancico: La Marimorena.
¿Porqué?
Pues porqué es muy animada. Pero sobretodo me gusta por la versión
de mi padre:
En
el portal de Belén hay un viejo haciendo botas,
se
le escapó el cuchillo y se ha cortado las pelotas...
Ande,
ande ande...
O la versión de los Mojinos Escocíos, que es más punky, igual que el Villancico de Extremoduro, ¡Manué!
O la versión de los Mojinos Escocíos, que es más punky, igual que el Villancico de Extremoduro, ¡Manué!
También
me gusta Los peces en el río, porqué me la cantaba mi abuela, igual
que la de Campana sobre campana y Hacia Belén va una burra (y el
doble sentido que se le puede encontrar).
Catalanas
me gustan todas, ya que me recuerdan cuando iba al colegio y las
cantabamos en el festival de navidad: Visca els tres reis, El 25 dedesembre, Allà sota una penya... todas en general.
Ya
sé que a lo mejor suena un poco cutre, pero yo, como muchas otras
cosas, soy una Peter Pan sin remedio, y en estas fechas (donde
también sé que hay mucha miseria) me gusta transportarme a cuando
era pequeña, disfrutar del momento con los míos
y
dejar las preocupaciones de lado por unos días, que los momentos son
únicos, y habrá muchas cenas, incluso con el mismo menú, pero os
aseguro que las vibraciones serán diferentes, la gente llevará otra
ropa y los canalones tendrán otro sabor.
CARINA
Y el nuevo villancico de Mario Vaquerizo!!
ResponderEliminarA pesar del consumismo, ¡son fiestas!.
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